miércoles, 24 de agosto de 2016

Me ha dicho la hechicera que hoy no duerme.









Le he preguntado a la deidad que habita en mi interior si "la hechicera" aún vive, y desde la mañana abierta a mí en clamores encendidos, recibí de ese dios una visión: una mujer sencilla atravesando el tráfico en vaqueros sumida en su diario redentor, desafiando, con su glorioso paso de Minerva hacia el trabajo, la tempestad ruidosa de la muerte.

Supe que su alquimia permanece, como un tsunami amaestrado en un rincón secreto de su cámara; oculto a los curiosos ojos de los hombres y del mundo.





4 comentarios:

  1. Una poesía de mujer.
    Simplemente bello.

    Mil besitos.

    ResponderEliminar
  2. Poesía para una mujer especial, una poeta, que ha llenado mi mundo poético y personal de biena magia. Por eso me alegra que te guste.

    Gracias por la visita y comentarios, Auroratris.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  3. Qué manera encantadora de mirar a una mujer. De verdad, hace rato que no leo una mirada así. Me gustó mucho!

    Abrazos!

    ResponderEliminar
  4. Patricia, hola, que alegría tu visita. Es una poeta compañera de Ultraversal. Digamos que me parió como poeta. Una mañana desperté y encontré un mensaje suyo al pie de un poema mío: "Un Shakesperiano lucha ante tus costas". Me retó a contrapuntear con ella. Por supuesto, yo recogí ese guante con un temor tremendo. Es la mejor experiencia personal que he vivido. Me moldeó, Eva Lucía Armas es lo mejor que me ha pasado en mucho tiempo. Su saber y sensibilidad almática es incalculable. Este pequeño texto es un homenaje a ella.

    Mil gracias por la visita.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar